La pirotecnia siempre ha estado presente para celebrar los días importantes como la navidad o año nuevo.

Pero ¿Alguna vez nos hemos puesto a pensar todo el daño que pueden ocasionar estos recursos?
Sobre todo ¿Cómo puede llegar a contaminar nuestra audición?

Pues intentaremos explicarlo a continuación.

Partimos desde el punto que la pirotecnia, lejos de mejorar las festividades, generan muchos daños para nuestra salud y eso se ve reflejado a través de la contaminación ambiental que proporcionan sus componentes a nuestro aire, al bienestar de nuestras mascotas o en general, todos los animales y, sobre todo, a nuestro sistema auditivo que llega a provoca diversos males.

Si somos objetivos con el tema, debemos saber que una detonación de fuegos artificiales equivale alrededor de 150 decibeles.

Lo normal en nosotros, es que podamos oír a 20 decibeles y en un adulto mayor, entre 70 a 80 decibeles. Partiendo por ello, es demasiada contaminación sonora para nuestra audición y gracias a ello, se podría correr el riesgo de padecer de alguna hipoacusia debido al ruido.

También, es un gran peligro para las personas que padecen trastornos como el autismo o de por sí, todas las que tienen alguna sensibilidad al ruido.

Sin embargo, desde los últimos años, se viene intentado detener el uso de este explosivo. En Lima desde el 2020, la municipalidad viene aplicando un plan de prohibición del uso de fuego artificiales en sus actividades (Resolución de Gerencia Municipal Metropolitana Nº 134-2020-MML/GMM). A partir de esta iniciativa, se dispuso que las demás municipalidades distritales se unieran a que no utilizaran la pirotecnia.

Recordemos que el uso de este material es bastante perjudicial para todos. Evitemos su uso para cuidar nuestra salud.