Con frecuencia, se llega a escuchar o comentar sobre un mito que, al empezar a utilizar audífonos, nuestra audición dependerá de ello y será “ocioso”.
Este rumor es totalmente falso y sobre ello explicaremos en la entrada de hoy.
Oído vago, es un término muy repetido y los que lo hablan sobre ello, generalmente son pacientes con hipoacusia que creen fielmente que su sistema auditivo será arruinado por los audífonos medicados debido a que la estimulación sonora no será buena.
Todo aquello está mal relacionado, pero partamos por los términos.
En primer lugar, la clave para mantener nuestro sistema auditivo en correcto funcionamiento a través de la estimulación que debe partir de sonidos en niveles equilibrado y la pérdida sonora no solo se ve reflejada al no poder oír, también la percepción de las palabras que, en general, cada vez van aumentando debido a que no se tiene una efectiva estimulación.
Por ende, se debe entender que, si bien los audífonos medicados no podrán detener la evolución de la hipoacusia, estos si estarán estimulando el sistema auditivo para prepararlo ante un negativo crecimiento del problema. Sería un respaldo para que nuestra capacidad de entender sea poco afectada. También, las calibraciones o terapias de entrenamiento de audífonos son importantes de recibir para que el entendimiento de su oído sea óptimo junto con su rendimiento de amplificación.
En conclusión, no hay que tenerles miedo a los audífonos porque “El mito del oído vago” no existe. Si llega a tener problemas de audición, es importante evaluarlo a tiempo si requiere utilizarlos o no.
Los audífonos medicados con la mejor tecnología, los mejores especialistas y una atención de primera.